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viernes, 25 de junio de 2010

Crítica final:
Infortunio social
Juguete Rabioso, primera novela de Roberto Godofredo Christophersen Arlt y publicada en 1926, muestra que no se necesita de personajes extraños o fantásticos, sino que una versión de la realidad puede servir para realizar una historia atrapante.
Esta obra corta de tono urbano, narra en cuatro capítulos la historia de Silvio Drogmán Astier, un muchacho humilde de clase porteña que sueña con un futuro con riqueza, pero pasa por diferentes situaciones frustrantes debido a los constantes fracasos y humillaciones que debe superar, las cuales lo alejan de de su propósito, sin embargo paradójicamente cuando va en contra de su comportamiento habitual las cosas parecen cambiar aunque traiciona a un amigo de igual condición que el.
La obra desde su titulo ya nos invita o sugiere algo, pero al leerla aparece sutilmente una dura parte de la sociedad, que ante una persona de clase social baja encuentran oportunidad para aprovecharse de la misma, sabiendo que a esta no le queda más que soportar resignadamente por no tener otra opción. Es así como Silvio debe pasar desesperadamente por trabajos mediocres, toparse con personas hostiles y ruines que humillan cada día más su bago sueño. Muchas veces la sociedad se comporta como en esta obra, obstaculizando el camino de las personas que conseguir algo y empujan a caer ante un sentimiento de vacio similar al del protagonista
cita: “ya no tengo palabras con las que pedir misericordia baldía y fea como una rodilla desnuda es mi alma”. Sin embargo cuando se presentan situaciones desgraciadas, la fuerza del hombre se reanuda para tratar de cambiarlas, aparece un destello de luz. En el tercer capítulo de la novela se manifiesta esta oportunidad para el protagonista, pero una vez más la sociedad sin valores donde reina la injusticia atrasa su progreso cuando es dado de baja para dar lugar a otro, la explicación
cita : “aquí no necesitamos personas inteligentes, sino brutos para el trabajo”.
Finalmente cuando ha pasado por tanto infortunio, Silvio realiza un acto indigno que lo lleva de humillado a humillador cuando traiciona a “rengo”, otro humilde como él, dejándole con una sensación
cita :“iré por la vida como si fuera un muerto. así veo la vida, como un gran desierto amarillo”.
Esta obra, es una manifestación de la vida, del destino, que nos tiene como juguetes y nos pone en situaciones en las cuales solo queda elegir las actuaciones que nos definen como personas.

sábado, 5 de junio de 2010

Crítica final:
Infortunio social
Juguete Rabioso, primera novela de Roberto Godofredo Christopher Arlt y publicada en 1926, muestra que no se necesita de personajes extraños o fantásticos, sino que una versión de la realidad puede servir para realizar una historia atrapante.
Esta obra corta de tono urbano, narra en cuatro capítulos la historia de Silvio Drogmán Astier, un muchacho humilde de clase porteña que sueña con un futuro con riqueza, pero pasa por diferentes situaciones frustrantes debido a los constantes fracasos y humillaciones que debe superar, las cuales lo alejan de de su propósito, sin embargo paradójicamente cuando va en contra de su comportamiento habitual las cosas parecen cambiar aunque traiciona a un amigo de igual condición que el.
La obra desde su titulo ya nos invita o sugiere algo, pero al leerla aparece sutilmente una dura parte de la sociedad, que ante una persona de clase social baja encuentran oportunidad para aprovecharse de la misma, sabiendo que a esta no le queda más que soportar resignadamente por no tener otra opción. Es así como Silvio debe pasar desesperadamente por trabajos mediocres, toparse con personas hostiles y ruines que humillan cada día más su bajo sueño. Muchas veces la sociedad se comporta como en esta obra, obstaculizando el camino de las personas que conseguir algo y empujan a caer ante un sentimiento de vacio similar al del protagonista “ya no tengo palabras con las que pedir misericordia baldía y fea como una rodilla desnuda es mi alma”. Sin embargo cuando se presentan situaciones desgraciadas, la fuerza del hombre se reanuda para tratar de cambiarlas, aparece un destello de luz. En el tercer capítulo de la novela se manifiesta esta oportunidad para el protagonista, pero una vez más la sociedad sin valores donde reina la injusticia atrasa su progreso cuando es dado de baja para dar lugar a otro, la explicación: “aquí no necesitamos personas inteligentes, sino brutos para el trabajo”. Finalmente cuando ha pasado por tanto infortunio, Silvio realiza un acto indigno que lo lleva de humillado a humillador cuando traiciona a “rengo”, otro humilde como él, dejándole con una sensación: “iré por la vida como si fuera un muerto.asi veo la vida, como un gran desierto amarillo”.Esta obra, es una manifestación de la vida, del destino, que nos tiene como juguetes y nos pone en situaciones en las cuales solo queda elegir las actuaciones que nos definen como personas.

Ensayo Rosas: el estratega

¿Quién diría que el niño nacido en el seno de una de las familias más destacadas de la ciudad y criado en una estancia, sería luego uno de los hombres más controvertidos de la historia? Juan Manuel Rosas, político y militar argentino, gobernador de Buenos Aires (1829-1832; 1835-1852) y principal dirigente de la Confederación Argentina (1835-1852), supo aprovechar la inestabilidad del país para tomar su control y caracterizar una época con el color del rojo punzó.

La letra de una canción dice “caminante no hay camino, camino se hace al andar” y eso fue lo que hizo este mandatario, su poder lo fue consiguiendo de a poco ganando seguidores. Comenzando el 6 de diciembre de 1829 cuando fue nombrado gobernador de Buenos Aires, cargo que desempeñó hasta 1832, años entre los cuales fue “el restaurador” y pacificador del conflictivo momento por el que pasaba la provincia de Buenos Aires. En 1833 dirigió una victoriosa campaña contra los indígenas del sur de Argentina, y dos años más tarde fue restablecido como gobernador, hecho que él aceptó con la condición de que le fueran conferidos poderes dictatoriales. Conseguidos éstos, impuso los criterios federales al frente de la Confederación Argentina y tras fundar su propio Partido Restaurador Apostólico, con el apoyo de la Sociedad Popular Restauradora, conocida como “La Mazorca”, que aterrorizó a sus adversarios unitarios, formó alianzas con los líderes de las demás provincias argentinas, logrando el control del comercio y de los asuntos exteriores. Esta participación en lo económico era algo natural, por el hecho de haber crecido en una estancia en la cual fue adquiriendo conocimiento del ganado, aprendiendo muy bien el manejo del oficio y otorgándole el merito del aprovechamiento de la carne, que inició las exportaciones de este recurso representativo de nuestro país, que hoy nos sigue distinguiendo.

La divisa punzó (de rojo muy vivo, color de los uniformes usados por la primera unidad militar de Rosas contra los británicos y luego en la campaña contra los indios meridionales) también fue un estratégico símbolo de Rosas, porque a través de él tuvo dominio y control, ya que se comenzó a usar como emblema de la lealtad federal, pero haciéndose luego obligatoria, sirviendo para identificar a quienes estaban en contra o a favor de su gobierno. No es raro que los principales apoyos de Rosas provinieran de los estancieros (que compartían sus intereses), pero también la Iglesia católica, al igual que de la población más humilde le brindaron su apoyo. Los principales opositores a su régimen eran; los unitarios por la supresión de la libertad en la que vivían, considerando además que la nación necesitaba un gobierno constitucional centralizado, por otra parte estaban los intelectuales y escritores quienes criticaban sus políticas y actuaciones y, por último, los caudillos provinciales que se resistían a su autoridad y que de inmediato fueron derrotados y reemplazados.

A pesar que la figura de Rosas y su gobierno es impulsado por el control total, al precio que sea, esto fue lo que motivó que los intelectuales y escritores se aferraran al sueño de una nación organizada y libre, quedando positivamente demostrado que a pesar del apoyo que Rosas recibía por parte de la mayoría, el esfuerzo de unos pocos con un ideal común sirvió para iniciar la revolución contra el dictador y terminar con ese periodo. Esteban Echeverría es uno de los escritores que crítico el momento y plasmó en su obra “el matadero”, una denuncia sutil del régimen rosista y de los que estaban a su favor. Esta obra, a pesar que salió a la luz hace tiempo, aun hoy llama la atención por su narrativa expresivamente realista y descriptiva, convirtiéndose en la portadora de ideales.

Concluyendo puedo decir que nuestro país paso por muchos periodos bueno y malos, Rosas fue una persona inteligente que quiso dejar su nombre en la historia y a través de cada uno de sus pasos, y bien pensados lo hizo. Pero como este periodo , fueron muchos los hechos de la historia, que no se pueden cambiar pero tal vez por todos esos acontecimientos la Argentina tuvo transitar para que llegue a ser lo que es hoy. Ya no podemos cambiar la historia del pasado, pero si prestarle atención para que se no cometan los mismos errores en el futuro.